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Rehabilitación – Mi manera, mi objetivo, mi historia

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Cuando reflexiono sobre mi historia de recuperación, siempre aparecen dos factores importantes. En primer lugar, la “negación” hacia la psiquiatría como única forma de superar mi condición. Cuestionaba el diagnóstico y los medicamentos, ya que en mí no tenían ningún efecto positivo. En mi estancia más larga en una clínica psiquiátrica, me dí cuenta de que la verdadera forma de curarme no estaba en la medicación que tomaba todos los días. Además no era muy satisfactorio saber que lo que yo tenía era una enfermedad. Tras reflexionar con mis compañeros, apareció otra forma de entender lo que me estaba pasando desde un enfoque distinto a la psiquiatría. Con humor nos dimos un empujón - la risa es sana y te hace sentir mejor. Las conversaciones informales venían bien a la hora de hablar del ambiente intrahospitalario. Fueron estas conversaciones y experiencias con otros compañeros lo que me empujó a seguir adelante. Con su ayuda, mis capacidades y habilidades desactivadas se activaron y volvieron a resurgir. En este entorno, yo podía volver a ser lo que fui sin sentir que otras personas me juzgan.
Teniendo en cuenta el objetivo del proceso que ya había empezado, los pensamientos sobre mi misma mejoraron y el futuro ahora ya no me parecía tan negativo. Hoy creo que fue la esperanza lo que hizo posible mi recuperación. Ahora, es el momento de poner en práctica esto que he aprendido en el camino, para así sacar el máximo partido de ello.
Yo sabía que necesitaba ayuda profesional que apoyara mis intenciones y planes. De esta manera la medicación se fue reduciendo hasta la dosis mínima necesaria. Empecé una psicoterapia de más largo plazo, que no estaba centrada en la enfermedad, sino en el desarrollo de mi potencial, fortaleciendo las habilidades que dejaban ya de estar enterradas.
Usé lo que aprendí durante la rehabilitación, la experiencia que gané reflexionando sobre mi misma y con otras personas, y seguí adelante. A través de algunas herramientas creativas, aprendí a apreciar la parte positiva de mi enfermedad y aprendí diferentes técnicas para poder transmitir lo que sé a otros.
Como paciente y con la profunda convicción de que el proceso de rehabilitación requiere más de una alternativa terapéutica. Espero que en un futuro el modelo de recuperación y el fomento del modelo de apoyo mutuo, obtengan una relevancia mayor en el sistema de salud pública.
Irene Seifriedsberger

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